Ok Mei no has visto nada,
tranquila. No era tu amiga con el castor, a quien engaño eran ellos jajaja
jajaja. Que chistoso, ¡lo tenían bien guardado! Nunca me lo imagine, por lo
menos ya no me sentiré em “rara” cuando me molesten con Charlie.
Como la habitación estaba ocupada
me dirigí a la biblioteca. Necesitaba pensar, que fue ese episodio con la
señora y el tal Abdel ¿Quiénes son? ¿Y si tenían razón? No lo creo, quizás
están locos, no tenían buena pinta en especial la anciana. Me estaba quedando
dormida, hundida en un mar de preguntas sin respuestas cuando:
-Vaya, no pensé que te encontraría rápido.-
La voz era familiar pero no recordaba bien. Alce mi viste y lo vi.
-¿Qué quieres?-
-Marilyne me dijo que estabas mal
más que cuando te fuiste de la cafetería, así que decidi buscarte, rebelde.-
-No quiero tu consuelo, Richard. No
quiero nada de ti.-
-¿Por qué? ¿Por qué soy amigo de
Billy?-
-...-
-¡Vamos di algo!-
-Disculpen, pero no pueden hablar
fuerte en la biblioteca, les pido que se retiren.-
-Está bien.- Dije, me escaparé de
Richard, sea como sea.
Empecé a correr, no mira hacia
atrás, sólo escuchaba mi nombre “Mei Misaki” “Mei Espera”. Estaba cansada de
correr había llegado al desierto, espero que se haya perdido en el mercado,
había una multitud de gente.
Caí arrodillada al suelo, en verdad
estaba agotada.
-¿Pensaste que escaparías de mí?-
No lo podía creer. Yo... yo no...
yo no quería estar con él.
-Déjame en paz (o Degame en pas
*sólo para entendidos* jajaja) Richard no quiero hablar contigo.-
-¿Por qué vas a llorar? ¿Por qué no
quieres hablarme? ¿Qué es lo que pasa Mei?-
-No te hagas el necio. Tú sabes de
lo que hablo.-
-¿Por qué no dejas que te quiera?-
-Por... por... Billy.-
-¿Es en serio? ¡Él no te quiere ver
Mei! ¿Aún lo quieres?-
-¡Claro que no! Es sólo que...-
-¿Qué Mei? ¿¡Qué!?-
-No quiero que su amistad termine.-
En ese momento Richard se arrodillo a mi lado, giro mi cara con delicadeza y
quedamos enfrentados. No pude evitar soltar una lágrima.
¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué hago
esto? ¿Está bien que... nos... besemos?
-Volvamos al centro ¿quieres?-
-Está bien. Tengo sueño.-
-¿Quieres que te cargue?-
-No, está bien.-
El camino fue silencioso e
incomodo, pero qué más da. Llegamos al
centro eran alrededor de las 19.30hs espero que Charlie no siga en la habitación.
Richard se despidió dándome otro beso, sin decir nada se fue.
Entre. Marilyne y el castor no
estaban. Me recosté y dormi.
-Mei despierta.-
-...-
-Mei.-
-Mmm basta.-
-¡MEI!-
-¿Qué?-
No hay comentarios:
Publicar un comentario